En pleno siglo XXI asistimos atónitos (al menos yo) a un renacimiento de la fotografía analógica. He empezado por comprar cámaras desechables.

La nueva moda de las fotos analógicas
Ya he contado algunas veces en este blog que mis hijas adolescentes no paran de sorprenderme y son una fuente continua de inspiración. Lo último ha sido que quieren cámaras de fotos analógicas. Evidentemente, la primera vez que me hablaron de hacer fotos analógicas y llevar el carrete a revelar me lo tomé a chiste y, al ver que no era un caso único (no solo les pasa a mis hijas), no me lo podía creer.
El resurgimiento de las fotografías analógicas
Hasta hace poco teníamos muy claro que alrededor del año 2000, el cambio de siglo, fue el fin de una era. Las fotografías digitales entraron en nuestro mundo y, con bastante velocidad, abandonamos las cámaras analógicas. A eso se le sumó que la cámara digital pasó a estar integrada en el teléfono móvil y ahora la llevamos siempre encima, en el bolsillo.
Algunos recordamos (con nostalgia?) cómo era la tecnología de cuando éramos más jóvenes. Era una época en que, para documentar fotográficamente un viaje, nos llevábamos unos carretes de 24 o 36 fotos y después, a la vuelta, teníamos que esperar una semana a que el laboratorio revelara las fotos. Y muchas veces, constatar que el encuadre era horroroso o la iluminación nefasta… Con las fotos digitales esto cambió: podemos hacer miles de fotos, podemos ver al instante si ha quedado bien o no y podemos aplicar filtros de todo tipo para mejorar las imágenes.
Por todo esto, me sorprende tanto la nueva moda de las fotos analógicas. Ya sé que “todo vuelve” pero esto no me lo esperaba. Y lo cierto es que los (pocos) laboratorios de revelado analógico que quedaban, están experimentando una gran demanda debido a esta afición de las nuevas generaciones.
La estética “vintage”
En todo caso, uno de los temas que más me interesa para contar en este blog es todo lo que tiene que ver con costumbres pasadas y actuales y la relación del mundo analógico y digital. Por tanto, este fenómeno de la fotografía analógica que resurge de sus cenizas me atrae particularmente.
Lo interesante es que la moda de las fotos analógicas no es una moda solamente “tecnológica”. Es sobre todo una moda estética y social. A la generación Z les atrae el aspecto “vintage” de las fotos analógicas reveladas en papel de revelar, e incluso les atrae el “ritual” de no ver el resultado hasta al cabo de una semana. Esa es la razón por la cual triunfan los filtros digitales de Instagram u otros con efectos antiguos o “vintage”.
Tipos de cámaras analógicas
Con esta visión “estética” de la moda de fotos analógicas, mis hijas están interesadas en (o sea, quieren que les regalen) tres tipos de cámaras:
La primera sería una cámara compacta analógica “clásica”. Lo mejor es que las venden con estilo “retro” o “vintage”.
El carrete se debe llevar a revelar y podemos usar tantos carretes como queramos. Hace falta comprar carretes fotográficos.
Después tenemos las máquinas de fotos analógicas instantáneas. No hace falta llevarlas a revelar porque la impresión en papel fotográfico es instantánea.
Hace falta comprar recambios de “hojas” de película instantáneas.
La opción más económica para “probar”, es las cámaras desechables analógicas de un solo uso, que se llevan enteras a revelar.
(Evidentemente, la cámara desechable Kodak ha sido la que les he comprado, por el momento) 😉
Dónde comprar cámaras analógicas
Para comprar la cámara es fácil. Si en las tiendas de fotografía no encuentras suficiente oferta, siguiendo algunos de los enlaces a Amazon que te he sugerido puedes comprar lo que te haga falta.
Dónde revelar fotos analógicas
Si estás en una gran ciudad seguro que hay laboratorios donde puedas revelar fotos analógicas. En Fotoprix, por ejemplo, tienen laboratorio propio y tardan una semana. Si no tienes acceso a laboratorios en tu ciudad, muchos ofrecen la opción de recibir carretes por correo postal y te mandan las fotos reveladas a casa. Esto es divertido, porque añades otra costumbre “vintage” que es mandar cosas por correo 😀
Otras supuestas incongruencias, simbiosis y anacronismos
En todo caso, uno de los temas que más me interesa para contar en este blog es todo lo que tiene que ver con las diferentes generaciones digitales, las costumbres pasadas y actuales y la relación del mundo analógico con el mundo digital.
Por tanto, este fenómeno de la fotografía analógica que resurge de sus cenizas me atrae particularmente. Pero no solamente me sorprende lo de la moda de las fotos analógicas. Hay otras incongruencias, simbiosis o anacronismos (no sé cómo llamarlo) que considero interesantes.
- Aplicar filtros de Instagram u otras apps para que las fotos parezcan antiguas o “vintage”. Simplemente, busca en Google [filtros vintage] y encontrarás decenas o centenares de Apps que imitan cámaras analógicas o proporcionan filtros. Alucinante.
- Ya sabemos que los selfis son algo importante para los adolescentes. Pero, ¡qué simbiosis analógico/digital más interesante sería hacerse un selfi para subir a Instagram con un marco físico tipo photocall de Instagram! 😉
- El ritual de seleccionar 25 fotografías de entre los miles de fotos digitales del ordenador para mandar imprimir un álbum en papel (que es el que realmente miramos habitualmente). En casa usamos los servicios de Hofmann.
En fin, voy a ver qué uso le hacen mis hijas a la cámara desechable y luego veremos hasta dónde lleva todo esto… 🙂 Ya me veo recuperando mi antigua cámara réflex analógica.